El lanugo en bebés: Protección natural y momento de caída

El lanugo en bebés es un vello suave y fino que cubre la piel de los recién nacidos. Esta capa de pelo proporciona una protección natural para la delicada piel de los bebés, manteniéndolos cálidos y regulando su temperatura corporal. Sin embargo, llega un momento en el desarrollo del bebé en el que el lanugo comienza a caerse para dar paso al crecimiento del vello definitivo. Este proceso de caída del lanugo es completamente normal y suele ocurrir alrededor de las primeras semanas de vida, dejando la piel del bebé lista para su nuevo ciclo de crecimiento.

Caída del lanugo en bebés: Cuándo sucede

La caída del lanugo en bebés es un proceso natural que ocurre durante el desarrollo del bebé en el útero y durante las primeras semanas de vida extrauterina. El lanugo es el vello fino y suave que cubre la piel del feto y que, en la mayoría de los casos, desaparece antes o poco después del nacimiento.

La caída del lanugo generalmente comienza alrededor de la semana 32 de gestación, cuando la piel del bebé comienza a producir una sustancia cerosa llamada vernix caseosa que ayuda a proteger la piel. A medida que el bebé se acerca al momento del parto, el lanugo comienza a caerse y se mezcla con esta sustancia protectora.

Una vez que el bebé nace, es común observar restos de lanugo en su piel, especialmente en áreas como los hombros, la espalda y la frente. Durante las primeras semanas de vida, el lanugo restante se va cayendo gradualmente a medida que la piel del bebé se adapta al ambiente exterior y comienza a producir melanina, el pigmento que le da color a la piel.

Es importante tener en cuenta que la caída del lanugo en bebés es un proceso natural y no requiere intervención. Sin embargo, si notas que el bebé tiene una cantidad excesiva de lanugo o si la caída del mismo se produce de manera anormal, es recomendable consultar con un pediatra para descartar posibles problemas de salud.

Caída

El lanugo en bebés es una protección natural que los acompaña en su desarrollo temprano. Este vello suave y fino les brinda calor y les ayuda a regular la temperatura corporal. A medida que crecen, el lanugo comienza a caerse para dar paso al nuevo crecimiento de cabello más grueso y fuerte. Este proceso es completamente normal y no requiere intervención. Es importante respetar los tiempos de cada bebé y disfrutar de cada etapa de su crecimiento.

Alberto Serrano

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